Este evento, sucedido hace varios años, es interesante para su lectura, por las explicaciones del entrevistado.
El Gerente de Distribución y Comercial de UTE, Ing. Carlos Milans dijo "La gente se caería de espaldas si cuento las cosas que he visto en años. Esa línea, que trabaja en situación de emergencia, estaba extremadamente cuidada pero cayó en una noche de la mayor calma".
La mayoría de los departamentos al sur del río Negro quedó ayer sin energía eléctrica a raíz de un corte en un cable conductor ubicado en Santa Lucía. Los datos de anoche hablaban de que se trataba de un cable localizado a la altura del kilómetro 28,300, lo que desactivó una de las dos líneas que suministran electricidad a todo el país.
La otra conexión estaba fuera de funcionamiento desde que cayeron 19 torres de alta tensión durante el temporal que afectó Montevideo y Canelones hace pocos días. Concretamente, unos 600 mil hogares de Montevideo, Canelones, San José, Maldonado, Rocha y Lavalleja quedaron a oscuras, en algunos casos durante más de tres horas, en un fenómeno que se inició aproximadamente a las 20:15.
Está en línea el ingeniero Carlos Milans, gerente de Distribución y Comercial de UTE. ¿Qué ocurrió? ¿Cuál fue la causa de este apagón tan importante?
La causa fue que, como consecuencia de la rotura de un separador, cuya causa todavía desconocemos -sospechamos que puede haber sido un balazo o una falla del material; me inclino por la primera causa-, la única línea de 500 que estaba trayendo la energía desde las centrales hidroeléctricas de Salto Grande, UTE y eventualmente la interconexión con Argentina, saliera de servicio provocando el gran apagón que afectó durante más de tres horas a alrededor de 600 mil clientes de UTE.
Usted maneja la posibilidad de que el origen haya sido un disparo. Anoche, en declaraciones a El Espectador, manejó la posibilidad de que un cazador hubiese efectuado un disparo que hubiese causado este daño. A las 20:15 de la noche eso no suena muy factible, ¿no? Salvo que haya sido un disparo con la intención de producir el desperfecto.
Para quien no tiene experiencia las cosas que suceden parecen insólitas, pero los que estamos en el tema son increíbles. Primero, la noche era muy brillante y las líneas de 500 brillan como si fueran un conductor encendido; son de aluminio, era una noche de luna espectacular... Pegarle a una línea es un gran desafío, es un conductor que se nota...
Es un gran desafío, pero es un gran desastre. ¿Puede haber alguien que se entretenga con eso?
Sí, lamentablemente. Le mostraría aisladores con balas incrustadas, conductores de cobre de la vieja línea Rincón del Bonete - Montevideo con balas incrustadas; los aisladores de vidrio estallan con un estruendo espectacular, como si fueran el parabrisas templado de un auto... Se sorprendería si se enterara de las cosas que pasan. Hierros que faltan en las torres, tierras de cobre que faltan en las torres y las dejan en la condición de armadilla eléctrica para quien la toque. Necesitan un bulón, lo sacan a la torre. El oyente puede caer de espaldas ante las cosas que puedo contar, que he visto en mis años en UTE en cuanto a fenómenos de este tipo.
Entonces estamos hablando de alguien que le habría disparado específicamente a tal o cual instalación eléctrica, no por error. Anoche interpreté que usted estaba hablando de un error, de un accidente, de que un cazador en medio de su actividad, tan típica de estos días de Semana de Turismo, hubiera errado el blanco.
No: yo hablo de hacer puntería, no estoy hablando de casualidad.
Eso es lo que puede haber ocurrido anoche.
Es una de las probables causas. Puede haber otras. Recién esta mañana podemos analizar el material y ver si la causa fue fragilidad o alguna consecuencia del temporal pasado y demás. Pero esto es difícil: hemos recorrido varias veces esta línea de 500, que era la única que quedaba y la que llevaba los 1.000 megavatios que podemos tomar desde las centrales. Fíjese que la mayoría de los carteles en las carreteras en la zona Este están agujereados por balazos. Hay cosas insólitas.
Hemos hecho un operativo brutal para cuidar esa línea y salta el día de mayor calma y tranquilidad, a menos de 30 quilómetros de Montevideo. Es algo que no cierra desde el punto de vista de falla electromecánica.
¿Ustedes van a tener un diagnóstico incontrastable en las próximas horas?
Sí: a raíz de este tema ya tenemos el separador y estamos chequeando la zona cercana, porque nos dicen que aparentemente hay otros separadores en iguales condiciones. Los separadores son una manopla de aluminio que sostiene los cuatro conductores de una de las fases; cada línea de 500 tiene tres fases, cada fase tiene cuatro conductores de aluminio con alma de acero, uno de los cuales reventó como consecuencia de la rotura y produjo el desperfecto.
¿Por qué demoró tanto en restablecerse el servicio?
El plan de alternativa ante un desperfecto de este tipo, como lo habíamos planificado pocas horas después de la gran tormenta de hace alrededor de 15 días, era alimentar con líneas de 500, dejar las centrales de respaldo y, en el caso de que la línea saliera de servicio como consecuencia de alguna tormenta o lo que fuera, alimentar con las líneas de 150 kV más las centrales térmicas.
Si entendí bien, debido a la salida de funcionamiento de la otra línea de alta tensión, en la medida que estaba trabajando sólo una de las dos líneas que llegan al sur del país desde las centrales hidroeléctricas, UTE dispuso que la central Batlle estuviera funcionando de manera permanenente.
Sí, de manera permanente pero con consumo bajo, porque de otro modo el costo es muy alto.
Estaba funcionando la Central Batlle, cosa que antes del tornado no ocurría.
Exactamente.
La idea es que la Central Batlle se mantenga funcionando porque ponerla en marcha ante una emergencia como la de anoche lleva demasiado tiempo.
Exactamente, demora más de 24 horas en llegar al régimen para poder tomar carga.
Por eso había que tenerla funcionando en el mínimo.
Exactamente.
Anoche estaba funcionando en el mínimo.
Anoche estaban las máquinas funcionando en el mínimo.
Y ¿qué pasó: por qué se demoró igual?
El procedimiento es el siguiente. Perdida la línea de 500, empezamos a traer energía a través de las líneas de 150, que son las que vienen de las centrales hidroeléctricas de UTE en el río Negro. Pero la capacidad de transporte de esas líneas es limitada, por lo cual damos la carga como parcial. Por eso hubo gente en Montevideo y otros departamentos que tuvo energía a los 10, 15, 20 minutos, y otra que no la tuvo.
Inmediatamente después entra la central térmica de La Tablada, que es una central de pico que se usa justamente para casos de emergencia y tiene unos 20 minutos de entrada; ésta no necesita estar en régimen para entrar, es una central diseñada para entrar rápidamente y tomar carga. Esa central entró pero no pudo cubrir el 100% de la carga porque esas centrales son de 113 megavatios por lo que, cuando uno suma los 113 de cada una de ellas más las líneas, no llega a los 600 megavatios de la carga.
Había que empezar a meter las máquinas de la Central Batlle. Una de las máquinas, a pesar de estar en servicio, cuando fue a tomar más carga se bloqueó como consecuencia de la falla de un circuito de servicio, que fue detectado y cambiado. Pero la detección y el cambio de ese transformador de servicio fue lo que demoró la puesta en marcha normal del procedimiento planeado. Por eso el apagón se fue a casi tres horas para algunos clientes, y para otros no.
¿Qué cabe aguardar a partir de lo que ocurrió anoche? ¿Queda planteado algún riesgo para el futuro, para los próximos días, mientras siga sin operar la otra línea de alta tensión que abastece el sur?
A las cuatro de la mañana quedó reparada la línea que sufrió la rotura del separador y el conductor. Por suerte se detectó rápidamente y está en pie. Esto significa que la estabilidad del sistema vuelve a ser bastante buena; no excelente, porque falta la otra línea de 500 -ambas se respaldan mutuamente-, que recién va a volver a funcionar dentro de 30 o 40 días, dependiendo de si el tiempo nos acompaña.
De cualquiera manera, queda el hecho de que hay que tener conciencia. Por más cazadores que haya, que vayan a hacer puntería con otros carteles, no con las torres de UTE, porque el perjuicio que le pueden causar al país es realmente muy importante. Un apagón de éstos cuesta mucho dinero.
Está claro, pero mejor que tampoco les tiren a los carteles.
Ni a los carteles, mejor ni a los animales.
Tomado del portal El Espectador de Uruguay.
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